Revisar
el video Contexto Histórico Siglo XVIII y XIX
Teniendo como
escenario la revolución Industrial y como antecedentes los problemas sociales originados
por la Revolución Francesa sobre sale un gran pensador Claude Henry Saint-Simon
quien fue el que desarrollo una teoría sociológica en la que pretendía dar
respuesta a dicha problemática social de aquel contexto histórico, el
Positivismo.
Siendo su
secretario, Auguste Comte, retoma la teoría iniciada por Saint-Simón, y lo
defiende.
POSITIVISMO
El Positivismo es una corriente o escuela
filosófica que afirma que el único conocimiento auténtico es el conocimiento científico, y que tal conocimiento solamente
puede surgir de la afirmación positiva de las teorías a través del método
científico.
Cabe resaltar
que el desarrollo del positivismo está vinculado a las consecuencias sociales de la Revolución Francesa, que transformó al ser humano y a la sociedad en objetos de estudio científico. Esta novedad
requería de una nueva teoría para legitimar los saberes obtenidos.
Es una corriente filosófica que surge en Francia a inicios del siglo XIX de la
mano del pensador francés Augusto Comte y del británico John
Stuart Mill y se extiende y desarrolla por el resto de Europa en
la segunda mitad.
Surge como manera de legitimar el estudio
científico aplicando el método de las Ciencias naturales en el estudio de la
sociedad.
Según
distintas versiones, la necesidad de estudiar científicamente al ser humano
nace debido a la experiencia que fue la Revolución Francesa, lo que obligó por
primera vez a ver a la sociedad y al individuo como objetos de estudio
científico.
A su vez, el objetivo del conocimiento para
el positivismo es explicar causalmente los fenómenos por medio de leyes
generales y universales, lo que le lleva a considerar a la razón como mero
medio para otros fines (razón instrumental).
El positivismo afirma que en la realidad
existe un orden único que tiende al
progreso indefinido de la sociedad. Todo lo que ocurre responde a ese orden
natural que hay que descubrir, conocer y aceptar. Así, el ser humano no es el
constructor de la realidad social, propone una suerte de inmovilismo social, de
orden social descartando la problematización.
El Positivismo aportó a la búsqueda humana la
comprensión de que el ser es capaz de encontrar respuestas lógicas al mundo
físico que le rodea, así como a todo lo que atañe a sus acciones y se convirtió
en un enemigo ideológico de los principios religiosos, fundamentalmente del
Cristianismo, considerados ideas erradas, porque apartaban al ser humano de la
realidad.
El conocimiento verdadero es sólo el que se
origina de la experiencia.
De esta manera, busca en la ciencia la única vía capaz de aportar el conocimiento y, a través de ella, se domina y comprende a la naturaleza y a la sociedad misma, ambas instancias partes del mundo real.
De esta manera, busca en la ciencia la única vía capaz de aportar el conocimiento y, a través de ella, se domina y comprende a la naturaleza y a la sociedad misma, ambas instancias partes del mundo real.
Sólo
lo visible puede verificarse, cuantificarse y transformarse. Por lo tanto, el
conocimiento sólo se origina de la experiencia y a través de él es posible
construir una sociedad, que provea a sus integrantes bienestar y progreso. Como
los hechos son la realidad científica, esta doctrina hizo de la disciplina
histórica uno de sus pilares fundamentales.
. Entre las críticas que se le hacen al
positivismo, está la incapacidad que posee el método de las ciencias
físico-naturales para conocer a la sociedad, el hombre, la cultura, los cuales tendrían propiedades como la
intencionalidad, la auto-reflexividad y la creación de significado, que serían
dejados de lado por la epistemología positivista.
Concepto de Hombre y
Sociedad
Para Comte los problemas particulares
dependían de los asuntos públicos; bosquejó un ideal de carácter humano, un
modelo en que el hombre parecía prosperar mejor y contribuir más; el interés social se origina en el amor y
en el conocimiento, y no en una abnegación ciega; el interés social se refiere al hombre íntegro y libre que intenta
hacer una contribución clara uniendo sus significados al gran fondo de
significados sociales, y no se refiere al jactancioso hombre moderno, que se
imagina libre porque puede acumular o deformar los significados
superficiales para adaptarlos a su capricho. Entre otras características del
Hombre según la teoría del Positivismo se encuentran:
El espíritu humano es el que ha creado todas las ideas,
las explicaciones y el fundamento de ellas.
El
hombre es un ser natural que se sirve de los otros seres naturales a los que
conoce, transforma y domina.
En
la sociedad se da la estática (leyes sociales y equilibrio, hay estructuras que
permanecen estables a través del tiempo) y la dinámica social (desarrollo
progresivo).
Orden y Progreso
Orden y progreso es un término que proviene
de una frase de Auguste Comte, exponente de la ideología y filosofía del
positivismo; "L'amour pour principe et l'ordre pour base; le progrès pour
but" ("El amor por principio, el orden por base, el progreso por
fin" en francés). La idea de progreso era un tópico cultural del siglo XIX
La interpretación dominante de los términos
entendía el progreso como crecimiento económico y modernización,
y el orden como la fijación de las
condiciones de tranquilidad en las cuales debía encontrarse el pueblo para
permitir la proyección del progreso sin pausa.
La mejor forma de asegurar el progreso no era
mediante la crítica, el conflicto de clases y la actitud revolucionaria, sino
que reconciliando las tendencias y las clases antagónicas, educando a todas las
clases de la sociedad... esto es lo que enseñaba la nueva ciencia positiva de
Comte, conciliando dos principios fundamentales: Orden y Progreso.
La Concepción Moral
Augusto Comte creó el positivismo e intentó
que éste fuera un sistema completo de moral, y no sólo un método científico y
técnico para analizar hechos sociales.
Comte anunció una “Religión de la Humanidad”
basada en el amor: en una nueva comunidad, la sociología (Ciencia de lo social)
estaría al servicio del orden social y
se usaría para promover el interés social y no los egoístas intereses
particulares predominantes.
Una de
las principales preocupaciones de este autor consistió en buscar el reemplazo
de la moral medieval por una nueva síntesis moral y científica. Para Comte el
positivismo significa la subordinación de la política a la moral, en donde la
ciencia es una fe demostrada.
La
ciencia del hombre en sociedad, para Comte, es la ciencia central a la que
todas las otras contribuyen y son periféricas, teniendo la idea del progreso
como principio guía. La ciencia al servicio del progreso del Hombre.
LEY
DE LOS TRES ESTADIOS (Concepto Evolutivo de la Sociedad)
Augusto Comte, pensó que la sociedad era un fenómeno científico, que se podía estudiar
como un todo y de su estudio surgirán principios generales a toda sociedad.
Estos principios serán lo suficientemente válidos como para conformar en los
seres humanos una acción social, que conduzca a la fraternidad y solidaridad
entre ellos, pues formarán acciones y creencias comunes.
Cada estadio implicaba la búsqueda por parte
de los seres humanos de una explicación de las cosas queremos saber.
Comte presenta a la historia humana en tres
fases o estadios:
1.
Estado teológico:
corresponde a la infancia de la humanidad; en esta época el hombre da
explicaciones fantásticas de los fenómenos naturales, utiliza categorías
antropológicas para comprender el mundo y técnicas mágicas para dominarlo.
La mente humana busca la naturaleza esencial
de las cosas, su origen ¿en dónde suceden?¿para que existen, busca el
conocimiento absoluto con fuerzas sobre naturales (dioses).
Se supone que son
fuerzas o seres sobrenaturales quienes crean y regulan los fenómenos; incluye
el fetichismo, el politeísmo y como último estadio, el monoteísmo como la única
divinidad que explica todo.
Estado metafísico:
las explicaciones son racionales, se busca el porqué de las cosas y se
sustituye a los dioses por entidades abstractas y términos metafísicos.Es el
estado intermedio entre el estado teológico y positivo, las fuerzas abstractas
sustituyen a los seres sobrenaturales, para explicar las causas originales y
los propósitos de las cosas(fuerzas como la naturaleza)
3. Estado científico o positivo:
es la definitiva. Ya no se busca por qué sino el cómo, el conocimiento se basa
en la observación y la experiencia y se expresa con el recurso de la
matemática. Se busca el conocimiento de las leyes de la Naturaleza para su
dominio técnico.
Además afirma que no es posible alcanzar un
conocimiento de realidades que estén más allá de lo dado, de lo positivo y
niega que la filosofía pueda dar información acerca del mundo, esta tarea
corresponde exclusivamente a las ciencias.
Es el Estadio más importante para Comte. Busca
los hechos y sus leyes, se basa a lo relevante a lo que es relativamente
importante conocer, y busca solo las leyes de los fenómenos, aplica la
investigación empírica como la teórica para obtener deductivamente una
teorización.
Jerarquía de las Ciencias
Si la aparición del estado positivo se correlaciona
con la mayoría de edad social e intelectual de la humanidad, esto se debe a la
desaparición del espíritu metafísico como una evolución natural hacia el estado
idóneo de la razón que traerá consigo el orden y la reorganización social. Se
trata de una total "regeneración" que viene determinada por el
progresivo desarrollo de las ciencias que, según Comte, han seguido cursos y
ritmos distintos, siendo la más retrasada la física social.
La filosofía positiva hace un intento de
clasificación de las ciencias, concebidas unitariamente como ramas de un tronco
común que, evolutivamente, forman un continuo en el que el desarrollo de cada
una establece las bases de la ciencia siguiente.
Comte clasifica las ciencias en cinco
fundamentales: astronomía, física,
química, fisiología y física social o sociología. Rechaza como ciencia a la
psicología y a la economía y concibe a las matemáticas más como un método e
instrumento previo que como ciencia teórica.
La finalidad de las ciencias es el control y
el dominio de la naturaleza y la sociedad. La búsqueda de relaciones estables
entre los fenómenos deriva en la construcción de leyes que permiten predecir el
futuro: paso previo a todo control.
Derivada de la fisiología, la sociología,
como culminación del espíritu positivo, se dedicará al estudio de los fenómenos
sociales y de sus leyes como camino para explicar la evolución de la humanidad
y favorecer un progreso controlado de la sociedad que excluya todo posible
cambio o revolución incontrolada.
Es en este punto donde aflora con toda su
fuerza la intención conservadora y reaccionaria de la filosofía de Comte. Su
apoyo a la dictadura de Napoleón III, así como sus ideas de control de la
opinión pública y de defensa a la propiedad privada y de concentración del capital
le han convertido en un adversario de la democracia y en un partidario de los
regímenes autoritarios. La dictadura del mexicano Porfirio Díaz utilizó el
positivismo como justificación teórica de su política. Estos hechos han
producido que la paternidad de Comte respecto a la sociología y el positivismo
haya sido reconocida a regañadientes
Dinámica Social
La dinámica social o "teoría del progreso
natural de la sociedad humana “La dinámica social se basa principalmente en la
ley de los tres estadios. Es cuando la
sociedad progresa es decir cuando se presenta un proceso evolutivo del
conocimiento es decir un tránsito de sociedad regida por la ciencia
La sociedad se
encuentra siempre en proceso de cambio, pero un cambio que se produce
ordenadamente, de acuerdo con leyes sociales. Se da un proceso evolutivo por el
que la sociedad progresa de un modo constante hacia su último y armonioso
destino bajo las leyes del positivismo. Comte llamaba a su dinámica social
“teoría del progreso natural de la sociedad humana”. Comte veía la humanidad en
una continua evolución hacia “las más nobles
disposiciones”, hacia el predominio del altruismo sobre el egoísmo.
En su opinión, la
sociedad sigue invariablemente esta ley del desarrollo progresivo y solo puede
variar el ritmo al que se produce, el cambio de uno a otro período, o de una a
otra sociedad.
Son las leyes
invariantes las que controlan este proceso de cambio, las personas pueden hacer
relativamente poco para influir en la marcha general del proceso.
Se dedica a
estudiar la historia del mundo para verificar si los datos verificaban su teoría
abstracta, pero no realiza una investigación en el sentido positivista, y de hecho
lo reconoce al afirmar que todo lo que ofrecía era historia abstracta, la ciencia
aun no estaba preparada para la historia concreta del mundo..
LIBERALISMO:
Las ideas esenciales del liberalismo fueron elaboradas por John Locke (1632-1704), Montesquieu (1689-1755), David Hume (1711-1776), Adam Smith (1723-1790) y John Stuart Mill (1806-1873), entre otros.
Adam Smith, además de su notable aportación a
la ciencia económica, presentaba al hombre en su totalidad, tomando en cuenta
todas sus motivaciones, hizo hincapié en el sentimiento de empatía que mantenía
unida a la sociedad, subrayó la
propensión del hombre a la acumulación y obtención de ganancias; todo esto bajo
el principio regulador de la justicia.
La palabra
“liberal” se utilizó por primera vez en España, a principios del siglo
XIX, para denotar simpatía por una monarquía constitucional, con una
constitución parecida a la inglesa. El
poder del gobierno era lo viejo. Lo
radicalmente nuevo es el respeto a las libertades individuales (también llamado
“derechos humanos”). Es por eso que el
socialismo y el comunismo son profundamente reaccionarios.
A finales del siglo XIX, las ideas del
liberalismo dominaban en todo el mundo occidental. El liberalismo, sin embargo, se vio
prácticamente marginalizado durante la mayor parte del siglo XX. Eso se debió, en gran medida, a la desilusión
con el capitalismo provocada por la Primera Guerra Mundial y la Gran Depresión
de los años 30.
El liberalismo es una corriente de
pensamiento filosófico, social, económico y de acción política, que promueve
las libertades civiles y el máximo límite al poder coactivo de los gobiernos
sobre las personas. Aboga principalmente por:
· El
desarrollo de las libertades individuales y, a partir de ésta, el progreso de
la sociedad.
·
El establecimiento de un Estado de Derecho,
en el que todas las personas, incluyendo aquellos que formen parte del
Gobierno, estén sometidos al mismo marco mínimo de leyes.
Sus
características o valores principales son:
· El individualismo, que
considera al individuo primordial, como persona única y en ejercicio de su
plena libertad, por encima de todo aspecto colectivo.
·
La
libertad como un derecho inviolable que se refiere a diversos
aspectos: libertad de pensamiento, de expresión, de asociación, de prensa,
etc., cuyo único límite consiste en la libertad de los demás, y que debe
constituir una garantía frente a la intromisión del gobierno en la vida de los
individuos.
·
El principio de igualdad entre las personas,
entendida en lo que se refiere a diversos campos jurídico y político. Es decir,
para el liberalismo, todos los ciudadanos son iguales ante la ley y ante el
Estado.
·
El derecho a la propiedad privada como fuente
de desarrollo e iniciativa individual, y como derecho inalterable que debe ser
salvaguardado y protegido por la ley.
·
El establecimiento de códigos civiles,
constituciones, e instituciones basadas en la división de poderes (Ejecutivo,
Legislativo y Judicial) y en la discusión y solución de los problemas por medio
de asambleas y parlamentos.
· La
Tolerancia Religiosa.
Historia:
Se considera a John Locke como uno de los
primeros pensadores liberales, siendo su Segundo tratado sobre el gobierno
civil la obra seminal de esta ideología. Luego de él, los economistas clásicos
como Adam Smith y David Ricardo continuaron esta línea de pensamiento,
especialmente en lo que se refiere a la conexión entre libertad política y
prosperidad económica. Smith, con su obra La investigación sobre la naturaleza
y causas de la riqueza de las naciones, exhorta a 'dejar hacer 'al mercado, en
lugar del soberano, en lo que a decisiones de compraventa se refiere.
En
cuanto a la política, la ideología liberal encuentra sus bases en
Montesquieu y en los padres fundadores americanos; parte del hecho de que no hay personas ni sistemas perfectos, y por
lo tanto, el Estado debe ser un conjunto de pesas y balanzas en el que se
contrapesen los distintos poderes que ostenta sobre el individuo, para que
ninguno pueda devenir en tiranía.
Concepto de estado o
Gobierno
Según la teoría liberal, el Estado debe seguir una política de mínima intervención, o
laissez faire (en francés, «dejar hacer»). Ésta se sustenta de un lado en la
convicción de que cada individuo buscará lo mejor para sí mismo y para el otro
con el fin de beneficiar a todos, siendo la labor del Estado corregir los casos
en que esto último no se cumpla. Los críticos del Liberalismo suelen insistir
en que la segunda premisa pocas veces se cumple, ya que a menudo algunos
individuos logran beneficiarse a costa del resto de la sociedad
Representantes
Adam Smith (1723-1790) es el primer
economista liberal clásico.
Su programa es el libre comercio y la
limitación del poder estatal para contribuir así al crecimiento económico y al
incremento de la producción.
Para Smith
el Estado resulta ser un instrumento de protección de la propiedad de los ricos
o poseedores frente a los pobres o no poseedores. "El Estado debe asegurar
la propiedad, se estableció realmente para defender al rico del pobre, o a
quienes tienen alguna propiedad contra los que no tienen ninguna"
("La riqueza de las naciones", Libro V, cap. 1, parte 2).
El análisis económico de Smith parte del
libre mercado, en el que se daría el equilibrio entre oferta y demanda y una
asignación racional y automática de recursos sin intervención del gobierno y con
libertad de elección plena del consumidor. En tales condiciones de competencia
perfecta, la circulación del dinero y de las mercancías entre los trabajadores,
empresarios y terratenientes conduce al equilibrio pues se obtiene una óptima
asignación de recursos al igualarse la producción de cada mercancía con su
demanda efectiva y el precio con el coste de producción.
Los ciudadanos movidos por su propio interés
invierten en los sectores productivos más rentables que les proporcionan
mayores beneficios o salarios trasladándose a otros sectores cuando la
rentabilidad decae
El
interés individual produce relaciones de sociabilidad e intercambio entre los
individuos. El egoísmo individual es beneficioso para todos. El mercado también
es beneficioso. Los intercambios en mutuo beneficio obtienen si el Estado no
interviene en tales relaciones. Los resultados de las acciones humanas son
independientes de sus motivaciones y de los planes deliberados previamente
trazados. Es la mano invisible que ordena teleológicamente las conductas hacia
una armonía natural de intereses.
Liberalismo
social, liberalismo económico y liberalismo político
El liberalismo es la ideología de la
libertad. Para los liberales, la libertad es el valor supremo, entendiendo
libertad como la ausencia de coerción. Si nadie me impide hacer algo, soy
libre. La libertad, sin embargo, no es la ausencia de leyes, como piensan
algunos
El
liberalismo social defiende la no intromisión del Estado o de
los colectivos en la conducta privada de los ciudadanos y en sus relaciones
sociales no-mercantiles, admitiendo grandes cotas de libertad de expresión y
religiosa, los diferentes tipos de relaciones sociales consentidas, morales,
etc. Sin embargo, considera valores más allá de la propia voluntad, como los valores religiosos o tradicionales.
El
liberalismo económico defiende la no intromisión del Estado en las relaciones mercantiles entre los ciudadanos (reduciendo los impuestos a su mínima expresión y eliminando cualquier
regulación sobre comercio, producción, etc.), sin dejar de lado la
protección a «débiles» (subsidios de desempleo, pensiones públicas,
beneficencia pública) o «fuertes» (aranceles, subsidios a la producción, etc.).
La impopularidad de reducir a veces la protección de los más desfavorecidos
lleva a los liberales a alegar que resulta perjudicial también para ellos,
porque entorpece el crecimiento, y reduce las oportunidades de ascenso y el
estímulo a los emprendedores. Los críticos, por el contrario, consideran que el
Estado puede intervenir precisamente fomentando estos ámbitos en el seno de los
grupos más desfavorecidos. El liberalismo económico tiende a ser identificado
con el capitalismo, aunque este no tiene por qué ser necesariamente liberal, ni
el liberalismo tiene por qué llevar a un sistema capitalista. Por ello muchas
críticas al capitalismo son trasladadas falazmente al liberalismo.
En la discusión filosófica teórica actual, se
suele dar el caso de que un pensador coincida a la vez con las posturas del
liberalismo social y el liberalismo económico. En la práctica política, es raro
que coincidan. En general, el intervencionismo económico y el liberalismo
social son característicos de la socialdemocracia y el eurocomunismo mientras
que el liberalismo económico y el control social son más característicos del
llamado neoliberalismo económico, pero la práctica real de la política obliga a
atender a muchas circunstancias, aparte de la propia ideología. Otras
políticas, como el comunismo leninista (especialmente en la época de Stalin) y
la autarquía franquista combinaban el intervencionismo económico con un rígido
control social. También se dan casos de que un mismo grupo de presión pida unas
medidas económicas liberales y otras intervencionistas. Por ejemplo, un sector
industrial puede reclamar libre circulación de bienes y servicios dentro de un
mercado, pero una fuerte protección frente a productores de fuera del país.
El liberalismo político
inspiró la organización del Estado durante el siglo XIX. Pero para conseguir
cambiar y consolidar un nuevo sistema de gobierno, era precisa una profunda
crítica y transformación social y económica, de modo que todos los individuos
tuvieran los mismos privilegios, y una mayor libertad de actuación.
NEOLIBERALISMO
A finales del siglo
XIX, las ideas del liberalismo dominaban en todo el mundo occidental. El
liberalismo, sin embargo, se vio prácticamente marginalizado durante la mayor
parte del siglo XX.
Eso se debió, en gran medida, a la desilusión
con el capitalismo provocada por la Primera Guerra Mundial y la Gran Depresión
de los años 30.
El Neoliberalismo
se origina en la etapa posterior a la Segunda Guerra Mundial, este, es heredero
de las teorías neoclásicas de finales del siglo XIX; pero es en los años
setenta cuando comienza su auge a nivel internacional.
Después de la
Segunda Guerra Mundial y hasta 1967
Europa presenta un crecimiento económico, entre 1969 y 1971 se presenta un
fenómeno conocido como “estanflación”,
poco crecimiento económico y aumento de
la inflación, generando una grave
crisis penetrando especialmente en los países capitalistas dependientes
(tercermundistas) y afectados gravemente a los socialistas.
Fueron los
gobiernos de Margaret Thatcher, en Gran Bretaña, Ronald Reagan, en Estados
Unidos que dieron un brusco viraje, recuperando las viejas ideas liberales y
las aplicaron con un éxito espectacular.
Era 1979, el año que Margaret Thatcher llegó
al poder y lanzo la revolución liberal en Gran Bretaña. Era muy conocida por justificar su programa
con una sola palabra, TINA: There is no Alternative. (No hay Alternativa).
El valor central de la doctrina de la Thatcher
y el neoliberalismo en sí mismo, es la noción de competencia entre naciones,
regiones, empresas y por supuesto, individuos. Estados Unidos, Europa y Japón inician procesos de estabilización económica,
disminuyendo cargas fiscales, recortando gastos sociales, facilitando el intercambio
con el exterior y se profundiza la división internacional del trabajo, se creía
que con estas medidas el mundo estaba listo para iniciar su fase de
crecimiento.
Desde principio de
los años 80, el liberalismo volvió a considerarse como la única forma adecuada
de gobernar. Era el nuevo liberalismo,
el neoliberalismo. El principal
teórico liberal del siglo XX ha sido F. A. Hayek.
Entre algunos
exponentes tenemos a:
En Europa
occidental: Lugwin Von Mises, economista y a Karl Popper, filósofo. En Estados Unidos: Milton Friedman,
economista.
En América Latina: Carlos Rangel, periodista y
Luis Pazos, economista.. Definición
de Neoliberalismo
La palabra liberalismo es, sin duda, una de las
más ambiguas, tanto en el vocabulario político como en el vocabulario
económico; designa una filosofía política, fundada en el valor de la libertad
individual, describe así mismo un conjunto de principios ideológicos de una
serie de partidos políticos en el mundo occidental e identifica una perspectiva
de análisis frente a los mecanismos rectores del funcionamiento de la economía.
Todos estos
significados, sin embargo, tienen su fundamento en el llamado "liberalismo
clásico", característico de un modo de observar el mundo de la economía
política que se remonta por lo menos hasta Adam Smith.
A riesgo de
comprimir en exceso los rasgos distintivos del liberalismo clásico, pudiera
señalarse, primero: un compromiso con la libertad personal, definida como la no
interferencia en las creencias y en la búsqueda de objetivos privados; segundo:
una política de estricta libertad económica y, tercero: una doctrina del
gobierno limitado y restringido a asegurar las funciones básicas de la
organización de la sociedad, particularmente, la libertad, la seguridad y la
justicia.
El liberalismo clásico entró en decadencia
hacia fines del siglo XIX, y el término liberal empezó a ser usado
frecuentemente para describir un liberalismo intervencionista o social,
particularmente en los Estados Unidos y en el Reino Unido.
Así, liberal en el sentido político llegó a
identificar a aquél que propendía por la intervención del Estado para corregir
particularmente las injusticias sociales.
Paralelamente y en parte como una respuesta tardía, fue surgiendo una
tendencia "neoliberal" en los Estados Unidos referida a un grupo de
políticos e intelectuales asociados con el partido demócrata, quienes aceptan
que la intervención gubernamental fue en el pasado demasiado extensa y que
debería hacerse un uso mayor del mercado.
Desde entonces el
término Neoliberalismo cobijó una tendencia de renacimiento y desarrollo de las
ideas liberales clásicas, tales como la importancia del individuo, el papel
limitado del Estado y el valor del mercado libre.
En síntesis y desde una perspectiva moderna,
el neoliberalismo puede ser definido como la creencia en que la intervención
gubernamental usualmente no funciona y que el mercado usualmente sí lo hace.
El fracaso del gobierno en la consecución de sus metas (fallo del gobierno) es
predecible y según los neoliberales ha sido confirmado por la experiencia.
El mercado, el
intercambio voluntario de bienes y servicios satisfará habitualmente los
requerimientos de los individuos con mucha mayor eficacia que el gobierno
dentro de las restricciones de recursos limitados.
En realidad, el neoliberalismo y más
precisamente el resurgimiento de las ideas liberales que impulsara Friedrich
Hayek desde los años cuarenta, ha tenido un contexto favorable para su
desenvolvimiento en los acontecimientos recientes de la historia mundial.
La tesis del llamado "fin de la
historia", expresión según la cual asistimos al triunfo de la democracia
liberal capitalista y a la derrota definitiva del marxismo, nos deparará según
sus defensores una expansión del liberalismo económico y político al que sólo
se opondrán determinadas formas de nacionalismo y religión, significando un
cambio radical en la consideración del papel del Estado como agente económico,
cuyas funciones básicas se asociaron desde los años treinta a la
responsabilidad de la puesta en marcha de los mecanismos necesarios para
asegurar objetivos como el pleno empleo de los recursos, y que tuvo su
fundamento teórico en la revolución keynesiana.
Actualmente, el neoliberalismo al oponerse a
la intervención redistributiva del Estado, perpetúa la desigualdad
socioeconómica tradicional y la acrecienta. Este sistema introduce el criterio
de que solamente el mercado posee la virtud de asignar eficientemente los recursos
y fijas a los diversos actores sociales los niveles de ingresos.
Se
abandonan así los esfuerzos por alcanzar la justicia social
mediante una estructura progresiva de impuestos y una asignación del gasto público
que privilegie a los demás desfavorecidos; y se dejan de lado intentos por la
democratización de la propiedad accionaría o la reforma agraria integral. Estamos peligrosamente empujados por una
cultura que radicaliza la ambición por poseer, acumular y consumir, y que
sustituye la realización de todas las personas en comunidades participativas y
solidarias por el éxito individual en los mercados.
El neoliberalismo
provoca esta crisis al llevar a la desaparición el bien común como objeto
central de la política y la economía. El bien común es sustituido por la
búsqueda de equilibrio de las fuerzas del mercado.
Diferencia
entre Liberalismo y Neoliberalismo
La diferencia
principal que se le atribuye con respecto al liberalismo clásico es que en este
el mercado es considerado el motor del progreso humano. En el liberalismo
económico se entiende que el libre comercio y las leyes del mercado deben ser salvaguardados
para que la mano invisible pueda gobernar en interés de todos.
El neoliberalismo, en cambio, va más allá.
Las leyes de los países deben plegarse
al mercado y no al revés.
El poder político no debe, según ellos, tener
influencia alguna en los movimientos de capital y los negocios de las
multinacionales, aunque ello vaya en detrimento del propio país que lo permite.
Así pues, a diferencia del liberalismo el
neoliberalismo rechaza de plano cualquier política intervencionista y social
que regule en lo más mínimo a las transacciones internacionales.
Se opone a
cualquier medida proteccionista y exige la privatización de las empresas públicas
como único camino ya que el neoliberalismo presupone que los hechos han
demostrado la invalidez de las medidas intervencionistas y propugna que el
interés particular de cada individuo y su competición con sus vecinos hará que
la sociedad se mueva sola hacia el interés común de esta.
Se puede decir que si el liberalismo es una
ideología socioeconómica permeable a la crítica y abierta a cambios, el neoliberalismo es casi una creencia ciega en unos
dogmas que, por fuerza, han de llevar a
la sociedad por el buen camino. De modo que para el neoliberalismo no hay
alternativa posible a su sistema.
Principios
del Neoliberalismo
Los principios
ideológicos del neoliberalismo reúnen los antiguos principios del liberalismo
económico y político del siglo pasado con características propias como el
pensamiento único, sucesor del postmodernismo filosófico y valedor principal de
los llamados "pensamientos débiles" en contraposición con aquellas
"doctrinas totalizadoras" -como el marxismo- que intenta encontrar
una explicación general a la existencia humana.
Sus principios
fundamentales son:
1. Propiedad privada
El liberalismo
defiende la propiedad privada sin límites. Esto conlleva necesariamente la
concentración de riqueza en una pequeña minoría privilegiada que actúa a nivel
planetario. «El liberalismo fruto
del desarrollo de la burguesía capitalista antes que nada fue y en ello puso su
mayor énfasis un sistema económico que amplió el mercado en una dimensión
mundial». (Manifiesto Comunista, Marx y Engels).
2. Libertad La libertad como valor absoluto, pero en
manos de esa minoría. Libertad, fundamentalmente, de los mercados de capitales
para decidir el sentido de la opinión pública; para comprar, vender o competir
sin trabas burocráticas ni fronteras; para adquirir los máximos beneficios e
invertirlos donde plazca. Lo que lleva a imponer los intereses de esta minoría
privilegiada "caiga quién caiga" por encima de las necesidades de la
mayoría de la sociedad y de la voluntad de los estados nacionales. «La libertad es una gran palabra; pero bajo
la bandera de la libertad de industria se han hecho las guerras más rapaces, y
bajo la bandera de la libertad de trabajo se ha expoliado a los trabajadores».
(Que hacer, Lenin)
3. Predominio del mercado Se defiende la no intervención del
estado en la economía, desmontando el Estado del bienestar y las políticas de
protección social. Se quiere evitar que el estado fije los precios y de
subsidios. Esto debe estar regulado por las propias leyes del mercado. Sin
embargo, si se requiere al estado como salvavidas de los capitalistas que
mediante mecanismos como la deuda pública se forran. Además, se exigen ayudas de todo tipo y
garantías a las inversiones de las empresas. Por tanto, más mercado y menos
estado, pero para los pobres.
4. Orden Se exige a los gobiernos mantener una
situación que no entorpezca los negocios ni la vida económica. Se considera
alteradores del orden público y subversivos a todos aquellos que exijan cosas
que estén en contra de los que más tienen.
El orden exige un fortalecimiento del estado: más policías, ejércitos
eficaces -profesionales-, control de los medios, limitación de derechos, endurecimiento de las leyes, etc.
"La democracia en sí misma jamás ha sido un valor central del
neoliberalismo" (Friedrich Hayek, ideólogo del neoliberalismo).
5.
Individualismo No importan los intereses
colectivos, sino los de los individuos. Es más no existe la colectividad. El
neoliberalismo no cree que uno y uno sumen dos. Siempre va a haber diferencias
irreconciliables entre uno y otro. Por ello es imposible la lucha de
clases. Tampoco es posible encontrar una
explicación global a lo que pasa en el mundo. El pensamiento está en crisis. Lo
que importan son los hechos. El individuo es el principio y el final de todas
las leyes. La satisfacción individual -la de los ricos, sobre todo- el sentido
de la vida.
En resumen podemos decir que: "Lo económico prima sobre lo político.
Se coloca a la economía en el puesto de mando
(un marxista distraído no renegaría de este principio); una economía, desde
luego, liberada de la ganga de lo social.
El mercado, cuya
mano invisible corrige las asperezas y disfunciones del capitalismo, y muy
especialmente los mercados financieros, cuyos signos orientan y determinan el
movimiento general de la economía.
La competencia y la competitividad, que
estimulan y dinamizan a las empresas llevándolas a una permanente y benéfica
modernización.
El libre intercambio sin límites, factor de
desarrollo ininterrumpido del comercio y, por consiguiente, de la
sociedad. La mundialización, tanto de la
producción manufacturera como de los flujos financieros. La división internacional del trabajo, que
modera las reivindicaciones sindicales y abarata los costos salariales. La moneda fuerte, factor de estabilización.
La desreglamentación, la privatización, la
liberalización. Cada vez menos estado y
un arbitraje constante en favor de los ingresos del capital en detrimento de
los del trabajo. Indiferencia con
respecto al costo ecológico
Características
del Neoliberalismo
Defienden un
mercado altamente competitivo Aceptan la intervención del Estado en la
economía, como árbitro o promovedor de la libre competencia, pero lo restringe
hasta despojarlo de la posibilidad de garantizar los bienes comunes mínimos que
se merece todo ciudadano por ser persona Se oponen al acaparamiento y a la
especulación.
Se oponen a la fijación compulsiva de salarios
por el Estado. Rechazan la regulación de precios por el Estado, ya que deben
fijarse en base a la relación oferta / demanda. Se oponen a la creación
compulsiva de empleo, eliminando los programas generales de creación de
oportunidades para todos y los sustituye por apoyos ocasionales a grupos
focalizados. Se oponen al gasto público burocrático, privatizando empresas bajo
la premisa de que la administración privada es mejor que la pública. Defienden
el libre comercio internacional, abriendo las fronteras para mercancías,
capitales y flujos financieros y deja sin suficiente protección a los pequeños
productores. Defienden la libertad de contratación del trabajo y la libre
movilidad de los factores de producción. Elimina obstáculos que podrían imponer
las legislaciones que protegen a los obreros. Libera de impuestos y de obligaciones
a grupos poderosos. Provoca el individualismo y la competencia llevando al
olvido el sentido de comunidad, produciendo la destrucción de la integridad
humana y ecológica. Expresa una política de ajuste y apertura. En su conjunto, las características del
neoliberalismo provocan una concentración mayor de la riqueza y del poder
económico en las manos de unos cuantos y dejan sin protección a la mayoría de
la población. Los defensores de este sistema afirman que estos ajustes
producirán, a largo plazo, un crecimiento que elevará los niveles de ingreso y
resolverá la situación de los desfavorecidos.
Otros
Neoliberalismo es
una teoría que surgió a fines del siglo XX, y vigente en la actualidad del
siglo XXI. Con este vocablo se caracteriza a una serie de postulados
económicos, filosóficos, sociales y políticos, que retoman fundamentos básicos
del Liberalismo, surgido durante el siglo XVIII en Europa.
Estos principios básicos son los de la libre
empresa, la competencia del mercado, gobiernos, que amparen la dinámica de la
producción capitalista y una ideología de carácter global que sostiene la necesidad
y virtud de la economía de mercado capitalista.
El neoliberalismo
surgió en 1930, como una manera de superar la crisis de la Bolsa de Nueva York
en 1929, que puso en jaque al mercado de valores. Además, en su conjunto de
teorías e ideologías, el neoliberalismo impulsa el fortalecimiento de las
economías nacionales, pero a partir de una división del trabajo pensado a gran
escala, para de ese modo poder ingresar en un proceso de globalización, lo cual
se denominó división internacional del trabajo, donde cada país fortalecía e
impulsaba su economía en un sector específico: en el caso de los países de
América Latina, la agricultura, la ganadería y otras actividades primarias
fueron los principales motores de inserción en esa división internacional, mientras
que los países europeos y Estados Unidos empujaron su capacidad industrial y
desarrollo tecnológico.
Como un “revivir”
de esa división internacional del trabajo, durante los años ’90 se relató el
Consenso de Washington, que se trataba de un listado que incluía políticas
económicas aconsejadas para América Latina con el objetivo de empujar su
crecimiento. Este listado fue elaborado por diferentes organismos financieros a
escala internacional en la ciudad de Washington DC y se transformó en el
programa aplicado por varios países de América Latina, como Argentina, Brasil,
Colombia, Perú y Chile.
Algunas medidas
tomadas por los gobiernos, de acuerdo a ese programa general que era el
Consenso de Washington fue privatizar la recaudación de aportes a la seguridad
social, disminuir el gasto público en salud y educación, que llevó a la
creación de escuelas privadas y de servicios de medicina paga, la no inversión
en el sector del transporte público, la casi nula presencia de programas
sociales a sectores sociales vulnerables, etc.
El pensamiento
neoliberal se sustenta en la idea y creación de una gran sociedad, cuyos
principios fundamentales son la libertad económica, de los individuos y el
mercado como principal institución económica y social. En tal sentido, el mercado
se convierte en la única y exclusiva realidad en el Neoliberalismo.
El neoliberalismo es un modelo económico que
se enmarca dentro de las doctrinas del liberalismo económico a su vez dentro
del sistema capitalista.
Quienes defienden al neoliberalismo, llamados
neoliberales, muestran su claro apoyo a la liberalización en materia de
economía, lo cual implica que los mercados sean totalmente abiertos, fomentando
de este modo el libre comercio, a partir de una desregulación de los mercados.
Además, el neoliberalismo tiene otra
característica fundamental que es la privatización,
por la idea de que la administración
privada es más eficiente y adecuada que la administración pública. Por eso,
de este modo se “achica” la intervención del Estado tanto en lo que hace
referencia a la regulación del mercado como así también al gasto e inversión
pública en materia de caminos y rutas, educación, salud, etc.
Tomado de los siguientes blog de Hombre Sociedad Ciencia y Tecnologìa
http://hombre-sociedad-ciencia-y-tecnologia.blogspot.com/2010/11/unidad-ii-corrientes-filosoficas.html
http://hombresociedadcienciaytecnologia.blogspot.com/2009/05/unidad-2-corrientes-filosoficas_2817.html
http://hombresociedadcienciatecnosalavirtual.blogspot.com/2010/05/unidad-ii-corrientes-filosoficas.html
http://hombreysociedadsh.blogspot.com/2009/05/semana-6-corrientes-filosoficas.html
http://hombreysociedad2.blogspot.com/2010/03/unidad-ii-corrientes-filosoficas.html